El valor de DesignOps: Cómo nuestro equipo transformó la operación del diseño en 2024

A lo largo del año, avanzamos con una convicción clara: no se trataba únicamente de mejorar lo que ya teníamos, sino de construir un sistema de diseño capaz de sostener el crecimiento, adaptarse al cambio y escalar junto a las necesidades del negocio.

Eficiencia operativa con resultados reales

Uno de los grandes desafíos que enfrentamos fue cómo lograr que el diseño no quedara aislado del resto de la operación. Sabíamos que no bastaba con diseñar bien: había que diseñar de manera eficiente, con un flujo de trabajo fluido, y con una estructura que eliminara cuellos de botella.

En este contexto, el DesignOps nos ayudó a identificar puntos críticos y a estandarizar procesos internos que antes variaban entre proyectos. ¿El resultado? Más tiempo para diseñar soluciones y menos para apagar incendios. Desde la definición de protocolos hasta la alineación con otras áreas de la compañía, cada mejora contribuyó a una operación más ágil y coordinada.

La eficiencia, sin embargo, no fue un fin en sí mismo. Cada fricción eliminada, cada paso optimizado, tuvo un impacto directo en la experiencia final de nuestros clientes. Porque cuando el equipo funciona bien, el resultado se nota.

Herramientas que multiplican el conocimiento

Uno de los grandes valores del DesignOps es su capacidad para transformar conocimientos individuales en inteligencia colectiva. En lugar de depender de soluciones puntuales, decidimos crear herramientas internas que no solo resolvieran problemas, sino que empoderaran a los equipos a largo plazo.

La Biblioteca UX, por ejemplo, se convirtió en mucho más que un repositorio de buenas prácticas. Hoy es una plataforma viva, que permite que cualquier persona del equipo acceda a estándares, recursos y documentación relevante sin tener que esperar. Por su parte, la Bitácora 2Brainer centralizó aprendizajes, decisiones clave y experimentos, ayudando a reducir la dependencia de reuniones innecesarias o correos que se pierden en el tiempo.

Estas iniciativas también jugaron un rol fundamental en la integración de nuevos miembros. Con una curva de aprendizaje más clara, los líderes pudieron enfocar sus esfuerzos en desarrollar el talento, en lugar de repetir procesos una y otra vez. Ese tipo de ahorro, aunque no siempre se mide en cifras, se siente en el día a día.

DesignOps también se trata de comunidad

Durante el año, una de las decisiones más significativas fue salir de nuestra burbuja. Sabíamos que muchas de las preguntas que nos hacíamos internamente estaban siendo discutidas en otros rincones de la región. Por eso, participamos activamente en la Conferencia DesignOps LATAM 2024, un espacio que nos permitió intercambiar experiencias con líderes de toda Latinoamérica.

Y no solo fuimos asistentes. En 2024 también organizamos el primer evento de DesignOps en Chile, una instancia que convocó a profesionales de distintas industrias y que abrió nuevas conversaciones sobre el rol estratégico del diseño en las organizaciones.

Estas experiencias no solo nos dieron visibilidad como consultora UX. También nos permitieron traer ideas frescas, validar enfoques y ajustar prácticas a partir del aprendizaje colectivo. Porque el DesignOps, cuando se entiende bien, no es solo una herramienta interna: es una filosofía que conecta personas, equipos y culturas de trabajo.

Resultados concretos, impacto real

A lo largo del año, el trabajo de sistematización, documentación y alineación no tardó en mostrar resultados. Los equipos comenzaron a operar con mayor autonomía, los líderes a tener más visibilidad sobre sus flujos y los clientes a percibir una mejora concreta en la entrega de valor.

Nuestra metodología, fortalecida por workshops personalizados, facilitó que muchos de nuestros clientes identificaran los verdaderos obstáculos que ralentizaban sus operaciones. Algunos lograron acortar sus ciclos de diseño; otros, mejorar la coordinación entre UX, desarrollo y negocio. En todos los casos, el DesignOps fue el catalizador de ese cambio.

Además, este enfoque nos permitió adaptar nuestras soluciones según el contexto de cada cliente. Porque no se trata de imponer una fórmula, sino de entender cómo aplicar los principios del DesignOps en entornos reales, con restricciones reales y objetivos de negocio específicos.

Lo que viene: métricas y evolución continua

En 2Brains creemos firmemente que mejorar no es un objetivo que se alcanza una vez. Es un proceso constante, donde cada avance abre nuevas preguntas. Por eso, uno de nuestros focos para 2025 será implementar métricas más robustas que nos permitan evaluar con mayor precisión el impacto de nuestras acciones.

Queremos pasar del "creemos que esto funcionó" al "sabemos cuánto valor generamos". Esto implica medir no solo el rendimiento interno, sino también el efecto en la experiencia de los usuarios finales y en los indicadores de negocio de nuestros clientes.

La evolución del DesignOps dentro de 2Brains no se detendrá. Seguiremos profundizando en cómo hacer que el diseño sea parte estructural del crecimiento organizacional. Y lo haremos con el mismo enfoque que nos ha guiado hasta ahora: colaborativo, ágil y centrado en las personas.

¿Conversamos?

Si estás buscando formas de escalar tu equipo de diseño, mejorar la colaboración interna o simplemente entender cómo el DesignOps puede ayudarte a transformar tu operación, conversemos.

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